Fallecimiento por no prestarse asistencia sanitaria de urgencia

Una negligencia médica puede suceder por distintas causas. En este caso, sucede si un paciente no es atendido de urgencia y fallece. Si algo así pasa, se considera mala praxis y la familia del fallecido podría reclamar. ¿Cómo gestionarlo?

Una de las negligencias médicas que están a la orden del día, sucede cuando no se le presta asistencia médica a un paciente al no estar en ese momento de urgencia el facultativo. También puede producirse si se tarda en atender al paciente o bien si se cree que es algo que puede esperar y finalmente fallece. 

En caso de una situación médica de emergencia, es fundamental que los servicios médicos actúen con mayor rigor en comparación con situaciones médicas donde el factor tiempo no es tan importante. Al fin y al cabo, hay ocasiones en las que el paciente puede esperar porque su vida no corre peligro, pero en otras no es así.

Por ello, para evitar problemas, es imprescindible que haya una coordinación perfecta a lo largo de toda la cadena, desde el momento en el que se solicita la ambulancia hasta que se llega al hospital y se atiende al paciente.

Para saber si es un caso de negligencia médica por no prestar servicio de urgencias al paciente, habrá que monitorizar todo lo sucedido desde el momento en que se recibe la llamada de emergencia. De esta forma, se podrá determinar si se cumplieron con los tiempos de respuesta de la ambulancia y cómo se procedió después.

Normalmente, nada más solicitar la ambulancia y buscar al paciente a su domicilio, se realiza el triaje en el centro hospitalario, se consulta el historial médico del paciente y se interviene en función de la dolencia. Por ello, el servicio de emergencias debe estar sincronizado de manera impecable y seguir estrictamente los protocolos médicos vigentes en ese momento para que todo salga bien. 

Todo esto puede tener un impacto en la oportunidad de atención para el paciente. Cualquier paso que se pase por alto o cualquier retraso puede causarle la muerte, sobre todo si se encuentra grave y el médico que lo atiende cree que es algo sin apenas importancia o bien que puede esperar.

Tipos de emergencias

Normalmente, hay 2 tipos de emergencias médicas según el lugar en el que suceden: Son las siguientes: 

• Emergencias extrahospitalarias: suceden fuera de las instalaciones del hospital, ya sea en el domicilio del paciente o en la ambulancia. Es importante tener en cuenta que los recursos humanos, materiales y técnicos suelen ser limitados en comparación con los disponibles en un centro médico, por lo que el diagnóstico inicial realizado por los profesionales de la salud que atienden la emergencia será vital para el éxito de la asistencia. El centro de control debe evaluar los medios que se movilizarán; como ambulancias medicalizadas, unidades de cuidados intensivos (UCI) o sin equipamiento médico, y también la especialidad de los profesionales de la salud que se enviarán.

• Emergencias hospitalarias: en este caso, se trata de situaciones urgentes que se atienden directamente en el centro médico. En general, no hay limitaciones en cuanto a los recursos sanitarios disponibles y pueden producirse por distintas causas. Por ejemplo, las siguientes:
  • Triaje incorrecto: una de las causas de negligencia médica en urgencias puede producirse debido a un triaje incorrecto. Esto ocurre cuando no se evalúa adecuadamente la gravedad de la enfermedad del paciente y no se le atiende con la prontitud necesaria según su prioridad. Si no se cataloga una urgencia vital de manera inmediata, esto suele tener graves consecuencias para el paciente, causando incluso su fallecimiento. Es una de las causas más comunes cuando sucede este tipo de negligencia médica en los hospitales. 
  • Omisión de pruebas diagnósticas: el médico, por diversas razones, puede pasar por alto la realización de pruebas que podrían ayudar a diagnosticar la verdadera enfermedad del paciente, ya que algunas no se pueden detectar mediante una exploración superficial. Realizar a tiempo análisis de sangre, un TAC o una resonancia puede salvar la vida a un paciente o ayudar a diagnosticar el verdadero problema de fondo.
  • El paciente no es atendido por el especialista adecuado: la negligencia también puede producirse si el servicio de urgencias no cuenta con un especialista adecuado para evaluar al paciente o bien porque el médico que interviene en el primer contacto cree que sabe lo que le ocurre al paciente, lo que podría resultar en un empeoramiento de la enfermedad del paciente. 
  • Alta prematura: la suma de algunas de las causas anteriores puede llevar a dar de alta al paciente antes de tiempo, lo cual puede empeorar su condición clínica cuando llega a casa. En este caso, implicaría que tampoco fue debidamente atendido por el servicio de urgencias.

¿Cómo reclamar si se produce una negligencia médica de este tipo?

Para reclamar una negligencia médica a causa de no prestar un adecuado servicio de urgencias al paciente, se debe disponer de la ayuda de un abogado especializado en derecho sanitario y contar con las siguiente documentación:

• Informes escritos y pruebas de imagen de los diagnósticos realizados (si los hay). 

• El historial clínico completo del paciente.

• La factura de la intervención médica y el presupuesto (en caso de tratarse de un centro privado) y, si lo hay, el consentimiento informado.

También te será de ayuda tener a mano los registros de las llamadas a los servicios de emergencias y de la llegada al hospital, así como todo lo sucedido a posteriori. Es así como se podrá demostrar si se actuó de forma negligente. 

¿De qué indemnización hablamos en estos casos?

La indemnización depende del daño ocasionado, de las secuelas y de la edad. En caso de fallecimiento, también depende de si la persona que reclama es un ascendiente, descendiente o bien hermano de la persona fallecida por la negligencia. 

¿Merece la pena denunciar?

Muchas personas se preguntan si realmente merece la pena hacerlo, dado que si es cierto que nada les va a devolver a la persona que ha fallecida. Sin embargo, muchos lo hacen porque son los derechos de esa persona y luchan hasta al final. De esa forma, también presionan para que no le suceda a ninguna otra persona.

En cualquier caso, hay personas que en esta situación deciden no denunciar porque puede ser un proceso lento. En cualquier caso, para que sirva de precedente, es importante denunciar esta falta de atención al ser un atentado contra la salud.

Si estás viviendo un caso similar y tienes dudas, piensa en cuantas más personas tomen esta decisión, menos probabilidad habrá de que vuelva a suceder. Con tu lucha, puedes conseguir que los centros hospitalarios refuercen su plantilla y también que los médicos analicen más cuidadosamente el estado del paciente y realicen las pruebas que sean necesarias para confirmar el diagnóstico.