No saber si se es alérgico a un determinado medicamento es algo frecuente en los pacientes, sobre todo si nunca antes se lo han administrado.
En la siguiente guía analizamos qué hacer en caso de negligencia por alergia a medicamentos.
Primera consulta gratis
Consulta con un abogado experto en Negligencias Médicas de tu zona. Accede a nuestra red de abogados de toda España y contacta con hasta 3 profesionales hoy mismo.
Te contamos todo lo que necesitas saber al respecto para luchar por tus derechos.
¿Qué es la negligencia por alergia a medicamentos?
En primer lugar, debes saber que como bien indica el nombre, la negligencia médica asociada a la alergia a medicamentos ocurre cuando un paciente sufre una reacción adversa debido a la administración de un medicamento al que es alérgico.
Las alergias están completamente a la orden del día. De hecho, puede que lleves tomando toda la vida un mismo medicamento y que de repente tu organismo empiece a rechazarlo.
Pero la negligencia sucede cuando el médico, siendo consciente de la alergia del paciente, suministra un medicamento al que es alérgico. Es decir, un medicamento que es dañino para el paciente y que puede llegar a poner su vida en peligro.
Causas de la negligencia por alergia a medicamentos
Entre las principales causas, destacamos las siguientes:
- Falta de conocimiento del paciente sobre su alergia: una de las principales causas de sufrir una alergia causada por un medicamento, es por el desconocimiento a que se tiene alergia a dicho paciente. Puede ocurrir que el paciente no esté al tanto y es responsabilidad del profesional de la salud obtener esta información de la historia clínica del paciente. En su historial deben registrarse y tenerse en cuenta todas las alergias relevantes.
- Errores en la prescripción o administración de medicamentos: los errores en la prescripción o administración de medicamentos pueden ocurrir por diversas razones, como la mala interpretación de la receta, la confusión entre nombres similares de medicamentos o la dosificación incorrecta. Estos errores pueden llevar a la administración de un medicamento al que el paciente es alérgico, cuyas consecuencias pueden ser fatales para el afectado.
- Falta de revisión adecuada del historial médico del paciente: el médico debe echar un vistazo en el historial del paciente antes de prescribir o administrar cualquier medicamento. Esto incluye verificar si hay alergias previas u otra información sobre posibles reacciones adversas a medicamentos anteriores.
- Falta de seguimiento de los medicamentos administrados previamente: en los centros médicos o entornos hospitalarios, es importante que se realice un seguimiento adecuado de los medicamentos administrados previamente al paciente. De esta forma se puede evitar la administración repetida de medicamentos a los que el paciente es alérgico.
- Falta de comunicación médico-paciente: la falta de comunicación clara y efectiva entre el personal médico y el paciente puede llevar a malentendidos sobre las alergias del paciente. Si no aparece nada en el historial, es importante que el médico le pregunte al paciente, para que pueda estar informado sobre sus posibles alergias y recetar medicamentos adecuados.
- Incumplimiento de protocolos médicos: otra causa de negligencia puede ser el incumplimiento de los protocolos médicos para verificar alergias antes de administrar un medicamento. Los hospitales y centros de salud deben contar con sistemas y procedimientos para evitar este tipo de errores.
Es muy importante conocer bien las causas para evitar una posible negligencia por el uso de medicamentos, dado que en casos graves puede llevar a reacciones alérgicas graves, incluyendo anafilaxia, poniendo en grave peligro la vida del paciente.
¿Cómo identificar una alergia a un medicamento?
Para saber si estás sufriendo un caso de negligencia por alergia a algún medicamento, antes de nada necesitas conocer los síntomas, para comprobar si efectivamente estás sufriendo una reacción adversa por ser alérgico.
Las alergias a medicamentos son reacciones adversas del sistema inmunológico del cuerpo a ciertos medicamentos. Cuando una persona es alérgica a un medicamento, el sistema inmunológico desencadena una respuesta defensiva para proteger al cuerpo.
Esta reacción puede manifestarse de diversas formas y grados de gravedad, desde una erupción cutánea leve hasta una reacción potencialmente mortal. Por eso es fundamental tener cuidado con las alergias, porque nunca se sabe cómo el cuerpo puede reaccionar.
Estas son algunas de las manifestaciones comunes de las alergias a medicamentos:
- Síntomas cutáneos: las reacciones alérgicas a medicamentos a menudo se manifiestan en la piel. Digamos que, suele ser el primer aviso. Por ello, pueden aparecer ronchas, urticaria, picazón, enrojecimiento o hinchazón en diferentes partes del cuerpo. Estas manifestaciones pueden variar en intensidad y localización. Incluso pueden suceder días después de empezar a tomar el medicamento, en forma de reacción tardía.
- Anafilaxia: esta es una reacción alérgica grave y potencialmente mortal que afecta a todo el cuerpo. Los síntomas pueden incluir dificultad para respirar, hinchazón de la cara, labios o garganta, ritmo cardíaco acelerado o muy bajo, mareos o incluso pérdida del conocimiento. Esta situación es de emergencia médica y requiere atención médica inmediata.
- Problemas respiratorios: algunas personas pueden experimentar problemas respiratorios leves como tos, dificultad para respirar u opresión en el pecho, como resultado de una reacción alérgica a medicamentos. Si notas algo así, detén inmediatamente el tratamiento y habla con tu médico.
- Síntomas gastrointestinales: las alergias a medicamentos también pueden afectar el sistema digestivo, lo que puede causar náuseas, vómitos, diarrea o dolor abdominal. Esto no debe confundirse con la reacción habitual de “dolor de estómago” causada por ciertos medicamentos fuertes, para los cuales se recomienda tomar previamente un protector de estómago.
- Síntomas sistémicos: además de los síntomas específicos mencionados, una reacción alérgica a medicamentos puede afectar a todo el cuerpo y provocar fiebre, fatiga, dolores musculares o malestar general.
Es importante destacar que no todas las reacciones adversas a medicamentos son alergias como tal. Algunas reacciones pueden ser efectos secundarios comunes o respuestas no inmunológicas a los medicamentos. Tal y como se detallan en el propio prospecto que lo acompaña.
Sin embargo, si experimentas síntomas inusuales o graves después de tomar un medicamento, es mejor que detengas el tratamiento y que vayas a tu centro médico o por urgencias para que puedan mirarte.
Para confirmar una alergia a un medicamento, esta debe ser evaluada por un alergólogo. Una vez confirmada la alergia, es importante que se lo comuniques a tus médicos para evitar futuras exposiciones y disfrutar de un tratamiento seguro.
Primera consulta gratis
Consulta con un abogado experto en Negligencias Médicas de tu zona. Accede a nuestra red de abogados de toda España y contacta con hasta 3 profesionales hoy mismo.
¿Cómo prevenir este tipo de negligencia?
Para prevenir la negligencia por alergia a medicamentos, es necesario que los médicos estén bien informados sobre las alergias de sus pacientes, que exista una comunicación entre ambos y que se lleven a cabo los protocolos adecuados.
Si en el historial del paciente no figuran alergias ni tampoco es consciente de ellas, el médico responsable no se estaría equivocando al suministrar el tratamiento que considera, dado que asume que el paciente puede tomarlo. Por lo que, si no hay registros de alergias previas ni el paciente las comunica, no sería negligencia.
Cómo reclamar una negligencia por alergia a medicamentos
Si deseas consultar con un abogado especialista, te invitamos a rellenar el formulario disponible en esta misma página en la que te encuentras ahora.
Tras ello, tu petición se enviará a Melendos, una plataforma legal de confianza que conecta a personas como tú con abogados, permitiéndote obtener presupuestos de hasta tres abogados especializados.
Todo ello con la comodidad de gestionarlo desde tu hogar y la seguridad de estar en contacto con abogados de primer nivel.